Al comenzar un nuevo año siempre hacemos una buena lista de propósitos. Ninguno será tan fácil y tan beneficioso como proponerte cumplir unos mínimos hábitos de belleza en tu día a día. Pero, ¿qué rutina de belleza es imprescindible seguir para cuidar tu cutis como se merece?
Cuidados básicos de la piel
Para tener un cutis saludable no debes saltarte nunca la limpieza, sobre todo si te has maquillado. Puedes elegir la clásica combinación de leche y tónico, apuntarte a los geles o usar agua micelar, perfecta para pieles sensibles.
Sea como sea, el objetivo es eliminar la suciedad acumulada, restos de maquillaje e impurezas. Así, preparas la piel para aplicar la hidratación o el tratamiento que necesites.
En la limpieza diaria es muy importante incluir el cuello y el escote, zonas tan sensibles como expuestas.
Hidratarte bien es vital para evitar que la piel se reseque y aparezcan arrugas o se marquen más, si ya tienes.
También hay que tener en cuenta el contorno de ojos, una piel fina y delicada en la que más se notan los primeros síntomas de envejecimiento.
Además, es aconsejable que cuides la nutrición que aplicas por la noche, que es cuando la piel responde mejor a los tratamientos.
Por otro lado, no viene mal una exfoliación semanal con un cepillo indicado para ello o algún producto tipo peeling. En esta línea, lo recomendable es acudir a un centro especializado en estética y belleza para que te hagan una limpieza de cutis más profunda.
La frecuencia dependerá de tu tipo de piel y de la contaminación que haya en la zona en la que vives.
Recuerda que tu piel refleja también cómo es tu descanso, si llevas una dieta sana y equilibrada y si bebes agua suficiente. Llevar un estilo de vida saludable es el mejor propósito de año nuevo, tanto para tu piel como para tu salud en general.